Es la primera vez que camino por la Av. Reforma en la Ciudad de México, en medio de una marcha en la que nadie sonríe. Se trata de acompañar a los padres y madres de los niños que murieron durante un incendio, en la Guardería ABC del IMSS de Hermosillo, Sonora.
Todos miramos las fotografías de los pequeños, en cartulinas, la mayoría hechas a mano, otros sostienen en sus manos juguetes infantiles. Incluso, los medios profesionales no se atreven a preguntar o entrevistar a los padres de Hermosillo, y cuando los más osados reporteros, de televisa y tv azteca, tratan de sacar una entrevista, son abucheados y tienen que salir de en medio de la multitud, entre rechiflas y consignas como las de “Fuera televisa”, Fuera tv azteca”. La rabia de los padres de los niños acompañados por la indignación de toda la gente concentrada, amplifica los gritos y reclamos.
A lo largo del recorrido, por Reforma Chapultepec, se escuchan los gritos de reclamo hacia el gobernador de Sonora y hacia Calderón, acusándolos de asesinos, exigiendo que sean castigados los dueños de la Guardería ABC .
Cuando la marcha llega a las calles de Polanco, los comensales de varios restaurantes que tienen terrazas a la calle, parecen no dar crédito a lo que ven. Con ojos desorbitados miran a los manifestantes, como llegados de otro planeta, o como si las consignas fuesen gritadas en un idioma que ellos no entendiesen. No cabe duda, que dentro de México, se viven mundos y realidades diferentes. El abismo entre las clases en el poder, y la clase de a pie, el ilimitado.
La marcha termina con un carta leída en las puertas de la Casa de Gobierno del estado de Sonora en el DF., y se deja una ofrenda, que incluye, fotos de los niños muertos, carteles, juguetes y veladoras.
Se ha hecho una convocatoria para apoyar la protesta afuera de la cámara de senadores el próximo 8 de julio, día en que comparecerá el director del IMSS.
Un pueblo que no se indigne ante esta injusticia, será rehén de su propio destino.
Inda-jani / Julio 8, 2009.
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